Muchos de vosotros que este verano no pudisteis viajar a causa de las restricciones debido a la pandemia del coronavirus, debéis saber que tenéis otra opción para acercaros el mar a la misma puerta de vuestra casa, con piscinas de arena.
Existen muchos tipos de piscinas, pero pocas son tan espectaculares y decorativas como las piscinas de arena compactada. Antes solo se podían ver en hoteles de cierta categoría o parques acuáticos que recreaban playas paradisíacas.
Su llegada al uso doméstico, ha supuesto toda una revolución en la configuración de jardines privados con piscinas. Y no es para menos, es como tener una playa del Caribe o una preciosa cala mediterránea en tu propia casa. Son completamente moldeables y suelen ir acompañadas de un trabajo de paisajismo que las integra de la forma natural al entorno.
Si dispones de una amplia zona al aire libre, esta idea tan tentadora puede convertirse fácilmente en una realidad. Cada vez es más habitual encontrar construcciones de piscinas de arena tipo playa que conjugan lo mejor de los baños en el mar con la intimidad que proporciona el propio hogar.
¿Cómo son?
Las piscinas de arena son construcciones a medida cuyo diseño simula el de una playa, con la ribera de arena y una entrada al agua en una pendiente progresiva. Normalmente, suelen constar de una base de hormigón gunitado, que garantiza que el vaso quede uniforme, revestido con resinas de arena compactada que le proporcionan un tacto suave y antideslizante. Hay otras variantes más sostenibles que, en lugar de hormigón, utilizan productos naturales como la arena de cuarzo.
El acabado de estas piscinas de arena es muy natural y queda muy armónico con el entorno.
Ventajas de instalar piscinas de arena
Las piscinas de arena se adaptan perfectamente al terreno, de manera que se puede personalizar tanto su tamaño como la profundidad.
Comienzan desde cota cero, es decir, no hay escaleras y la entrada a la profundidad se hace progresivamente, como en la playa. Por tanto, más accesible y cómoda para personas con movilidad reducida, niños o personas mayores.
El diseño permite hacerse a medida y se puede elegir entre arena blanca si es que quieres evocar esas paradisiacas playas caribeñas o emulando un entorno volcánico con rocas.
Son antideslizantes, tanto en seco como en mojado y la superficie de la orilla se mantiene siempre a una temperatura óptima.
Las piscinas de arena son aptas para todos los climas y sí, soportan el frío y las nevadas. Se pueden climatizar igual que las piscinas tradicionales. De hecho, se les puede aplicar exactamente la misma tecnología que hay disponible para las piscinas normales ya que, básicamente, la única diferencia entre ambos tipos es estética.
Lo que necesitarás
Hay que contar con un área lo suficientemente grande como para que se pueda implantar adecuadamente y recuerda que necesitas una inversión más alta que las convencionales.
Debido a sus materiales porosos, la limpieza puede resultar más complicada en algunos casos.
Mantenimiento de las piscinas de arena
En principio, el mantenimiento de una piscina de arena no difiere mucho del de una convencional, es decir, requiere el uso de depuradora y hacer tratamientos del agua con productos específicos (cloro, cloración salina, ultravioletas, ozono, etc.). Eso sí, la limpieza debe ser más frecuente y debe incluir también las orillas, para las que se usa un sistema de agua a presión.
Suelen ir acompañadas de un proyecto de paisajismo que las integra perfectamente a las peculiaridades de cada jardín. Este hecho contribuye a que además del mantenimiento de la propia piscina, deberás incluir le mantenimiento de la vegetación.
Las piscinas de arena también requieren de una buena iluminación y, sobre todo, que sea bonita y mantenga la elegancia del espacio. Asimismo, deberás tener muy en cuenta la distribución de las fuentes de luz para crear una perfecta armonía en el lugar. Las piedras con luz resultan muy atractivas.
La vegetación
Ya te hemos comentado anteriormente que el paisajismo que acompaña a las piscinas de arena, hacen que el resultado sea espectacular. Asegúrate en elegir las plantas que mejor van a la climatología de tu zona.
Las plantas acuáticas, además de proporcionar un buen aspecto decorativo, proporcionan el oxígeno durante el día, frenan el sol en verano y ofrecen una decoración particular para tu casa. Estas plantas también sirven como competidoras de las algas, ya que consumen los mismos nutrientes.
De manera general te damos algunos consejos para el clima mediterráneo y que además son plantas acuáticas. Podrían ser el Papirus, el Equisetum, el lirio o los nenúfares. Habitualmente en grandes viveros ya se disponen de gran variedad de éste tipo de plantas, por otro lado hay algunos viveros que están especializados en plantas acuáticas, y también se podrían dirigir a estas instalaciones.
Con todos estos motivos que te hemos enumerado… ¿A qué esperas para tener una de estas en tu hogar?
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Para suelo de piscina de arena de unos 30 m cuadrados